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(PdSL-May12). La escritora María Esther Rosales de Orozco ha honrado la cultura puntana con mas de 50 años al servicio de la educación y las letras. Actualmente está abocada a la realización de su tercer libro «Sembradores 3», ya que ya ha editado el «Sembradores 1» y el «Sembradores2» y ambos se encuentran a la venta en Librería Anello en Colón y Belgrano.
Precisamente en su segundo libro, «Sembradores 2» se hace referencia a la vida y obra de queridos comerciantes y vecinos de la ciudad de San Luis, quienes forjaron la historia del pueblo en todo el Siglo XX en las callecitas de tierra, donde sólo las cuadras del centro eran asfaltadas.
En este relato muy bien concatenado entre pasajes, calles y avenidas se resume la vida y obra de los Aljadeff, los Anzulovich, los Vescia, los Andrada, los Allende, dueños de la famosa «Confitería Mayo».
Conocidas firmas comerciales, que tenían identidad genuina y donde sus propietarios valían por su honra y no por sus bienes; como la tradicional Farmacia del Indio, Transportes Benoza, El Trust Ropero, Chichino muebles con toda su historia relatada desde 1932 hasta la actualidad.
Hombres de paciencia y rectitud como don Antonio Bossio, un azulejista y mosajista que vino en un barco de Italia en 1903 y se enamoró de esta tierra puntana; o como Eugenio Brovarone, que a pesar de su profesión de periodista y locutor se las ingenió de vendedor de diarios en Bs As hasta que el destino o los vientos lo trajeran hasta el Pasaje Juan Llerena.
Don Cayetano Cacace con su almacén de rubros generales y la Sastrería El Gentleman; sin olvidar a Antonio Cangiano, hijo de Adolfo y su Madre Carmen Aiello quienes lo preferían por su oficio de carpintero, pero sin dejar de repetirle que «primero estaba el estudio».
La lista de hojas ilustres es larga, pero no podemos dejar de mencionar algunos, aunque sólo sea por la nómina: Antonio Cangiano, carpintero; Eduardo Cangiano, peluquero; Carmen Carmosino, zapatero; Roberto Castro, diariero; Alejandro y Felipe Cazés, comerciantes; Don Moisés Hodara; Santi Celi, agricultor; Isidoro Celorrio, el Cholo; Adolfo Alberto Correa, cocinero; Nicolás Costa Cucinota, hojalatero; Esteban José Costamagna, vendedor de ropas para niños; Rosa Depasquale y Sebastián Crinó; Juan DÁmico, el peluquero; Giussupe DÁquino, Giusseppe De Ianello, peluquero; Francesco De Pascuale, carpintero; Pablo Di Chiachio y María Vicenta Ricci; Victorio Debatista y María Mainero; Pascual Di Sisto, dueño del Hotel Royal; Martín Divizia, dueño de La Reina; Carmelo Duvara, Cochero de plaza; Agustín Enciso y Blanca Nélida Lucero; Enrique Lopez Vila, dueño del Hotel España; Don Pedro Ferrieres y doña Berta Tamalet; Milo Francini, mecánico de máquinas de escribir; Luis Fusco, panadero; Juan Eustaquio Garro, el colchonero chaqueño, ...
Casa Daed
Una de las tantas exclusividades o curiosidades que uno se asombra al leer estas páginas, es la historia de Casa Daed.
En febrero de 1952, arriban a la Argentina, provenientes del Líbano, la familia Gettar Tarabay (de religión católica apostólica maronita), conformada por el matrimonio de Isaias Gettar Tarabay, y Daed Tarabay de Gettar también nacida en El Líbano (Medio Oriente) en 1924. Assad Tarabay y Syrila Ledesma son los padres de Isaías y la señora Ledesma era la hija de Don Juan Ledesma, quien fuera el empresario fundador del Ingenio Ledesma en Tucumán.
Actualmente Casa Daed es atendida por Syri Gettar Tarabay y su hija Ivana Daed Isem Gettar actuales propietarias y su local funciona en la Galería Sananes, Local 15.
Otro grande, que es mencionado en este libro
Don Moisés Sananes fue el fundador de la Galería Sananes. Su fecha de fundación es del 15 de Mayo de 1962. En una reunión a la que asistieron el Gobernador, el ministro de Hacienda, el intendente municipal. El proyecto de obra estuvo a cargo del ingeniero Jorge Benzaquen y contaba con 43 locales en la planta baja y 20 oficinas en la planta alta cubriendo así 2.500 metros cuadrados y tuvo un costo de 18 millones de pesos. Fue y sige siendo única galería que va desde una a otra calle.
(PdSL-May12). La escritora María Esther Rosales de Orozco ha honrado la cultura puntana con mas de 50 años al servicio de la educación y las letras. Actualmente está abocada a la realización de su tercer libro «Sembradores 3», ya que ya ha editado el «Sembradores 1» y el «Sembradores2» y ambos se encuentran a la venta en Librería Anello en Colón y Belgrano.
Precisamente en su segundo libro, «Sembradores 2» se hace referencia a la vida y obra de queridos comerciantes y vecinos de la ciudad de San Luis, quienes forjaron la historia del pueblo en todo el Siglo XX en las callecitas de tierra, donde sólo las cuadras del centro eran asfaltadas.
En este relato muy bien concatenado entre pasajes, calles y avenidas se resume la vida y obra de los Aljadeff, los Anzulovich, los Vescia, los Andrada, los Allende, dueños de la famosa «Confitería Mayo».
Conocidas firmas comerciales, que tenían identidad genuina y donde sus propietarios valían por su honra y no por sus bienes; como la tradicional Farmacia del Indio, Transportes Benoza, El Trust Ropero, Chichino muebles con toda su historia relatada desde 1932 hasta la actualidad.
Hombres de paciencia y rectitud como don Antonio Bossio, un azulejista y mosajista que vino en un barco de Italia en 1903 y se enamoró de esta tierra puntana; o como Eugenio Brovarone, que a pesar de su profesión de periodista y locutor se las ingenió de vendedor de diarios en Bs As hasta que el destino o los vientos lo trajeran hasta el Pasaje Juan Llerena.
Don Cayetano Cacace con su almacén de rubros generales y la Sastrería El Gentleman; sin olvidar a Antonio Cangiano, hijo de Adolfo y su Madre Carmen Aiello quienes lo preferían por su oficio de carpintero, pero sin dejar de repetirle que «primero estaba el estudio».
La lista de hojas ilustres es larga, pero no podemos dejar de mencionar algunos, aunque sólo sea por la nómina: Antonio Cangiano, carpintero; Eduardo Cangiano, peluquero; Carmen Carmosino, zapatero; Roberto Castro, diariero; Alejandro y Felipe Cazés, comerciantes; Don Moisés Hodara; Santi Celi, agricultor; Isidoro Celorrio, el Cholo; Adolfo Alberto Correa, cocinero; Nicolás Costa Cucinota, hojalatero; Esteban José Costamagna, vendedor de ropas para niños; Rosa Depasquale y Sebastián Crinó; Juan DÁmico, el peluquero; Giussupe DÁquino, Giusseppe De Ianello, peluquero; Francesco De Pascuale, carpintero; Pablo Di Chiachio y María Vicenta Ricci; Victorio Debatista y María Mainero; Pascual Di Sisto, dueño del Hotel Royal; Martín Divizia, dueño de La Reina; Carmelo Duvara, Cochero de plaza; Agustín Enciso y Blanca Nélida Lucero; Enrique Lopez Vila, dueño del Hotel España; Don Pedro Ferrieres y doña Berta Tamalet; Milo Francini, mecánico de máquinas de escribir; Luis Fusco, panadero; Juan Eustaquio Garro, el colchonero chaqueño, ...
Casa Daed
Una de las tantas exclusividades o curiosidades que uno se asombra al leer estas páginas, es la historia de Casa Daed.
En febrero de 1952, arriban a la Argentina, provenientes del Líbano, la familia Gettar Tarabay (de religión católica apostólica maronita), conformada por el matrimonio de Isaias Gettar Tarabay, y Daed Tarabay de Gettar también nacida en El Líbano (Medio Oriente) en 1924. Assad Tarabay y Syrila Ledesma son los padres de Isaías y la señora Ledesma era la hija de Don Juan Ledesma, quien fuera el empresario fundador del Ingenio Ledesma en Tucumán.
Actualmente Casa Daed es atendida por Syri Gettar Tarabay y su hija Ivana Daed Isem Gettar actuales propietarias y su local funciona en la Galería Sananes, Local 15.
Otro grande, que es mencionado en este libro
Don Moisés Sananes fue el fundador de la Galería Sananes. Su fecha de fundación es del 15 de Mayo de 1962. En una reunión a la que asistieron el Gobernador, el ministro de Hacienda, el intendente municipal. El proyecto de obra estuvo a cargo del ingeniero Jorge Benzaquen y contaba con 43 locales en la planta baja y 20 oficinas en la planta alta cubriendo así 2.500 metros cuadrados y tuvo un costo de 18 millones de pesos. Fue y sige siendo única galería que va desde una a otra calle.
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