DOCENTES: La olla a punto de estallar
Tal como ocurre anualmente, los docentes vuelven a manifestar su disconformidad con las «patéticas» medidas que se toman a la hora de ajustar sus salarios.
Durante esta próxima semana se van a ver los resultados y también se volverán a ver los guardapolvos cortando las rutas y quemando gomas en distintos puntos de la provincia.
La novedad de este año, es que hay que esperar la llamada del Ministro para poder sentarse a negociar paritarias entre los diferentes gremios y
el Gobierno.San Luis tiene una larga historia de reveses en cuanto a este tipo de conflictos que metafóricamente hablando, se podría decir que mas que olla es un volcán a punto de explotar, ya que han sido muchos los años de injusticias llevando a la calidad educativa a niveles alarmantes que se reflejan en la calidad de los alumnos de la mayoría de las escuelas provinciales.
La cuestión es realmente triste. Porque los padres también caen en la mediocridad del sistema educativo. Es todo el pueblo el que se perjudica cuando se atenta con la calidad educativa en cualquier estado del mundo.
En todos los estudios serios que se han hecho en cuanto a la calidad educativa, todos coinciden que es un cóctel de ingredientes, pero que el factor primordial pasa por el salario de los maestros y profesores.
Sin buenos sueldos, es imposible hablar de calidad educativa. Ojalá fuera ésta una falsa premisa. Pero lamentablemente es la cita mas concreta que deberían tener los funcionarios de los estados a la hora de ceñir sus puños antes de marcar los sueldos de los docentes.
En esta provincia, cuna de maestros, se ve que cada vez son menos los alumnos que salen del secundario con buenas probabilidades para ingresar a la Universidad. Eso es una vergüenza, una ofensa que no puede ni siquiera desmentirse por ningún profesor de cualquier establecimiento secundario, salvo las honrosas excepciones que aparecen como rosas en las aulas.
¿Hay que seguir bajando la cabeza?, ¿A favor de quien?, Antes había quienes aguantaban todo porque decían que lo amaban al Adolfo, después decían que le temían al Alberto y ahora que van a decir que Poggi los seduce con su perfume de gerente afrancesado?.
Todos los docentes, jóvenes y viejos saben que el «ninguneo» en los salarios es la piedra angular del sometimiento. Todos lloran por sus miserias y saben que el acomodo de los «pocos» que se sienten dioses cuando se suben al 0 Km, es la clave para que el circo siga funcionando.
La trampa consiste en generar un sistema de excepciones entre los mas pobres, para taparles las boca con un supuesto bienestar en detrimento de todo un sistema salarial del docente colmado de miseria e injusticias.
En este ardid es donde ascienden los de mas abajo y los de arriba quedan en «off-side, obviamente», suben los que no tienen que subir y saltan los mas vulnerables; parece una obra de Maquiavello, pero acá no es ficción, es realidad.
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