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Opinión
Por Carlos Rojas
Se acerca el final de otro año más y siempre es necesario realizar balances y evaluar lo hecho a lo largo de él.-
Año 2010 que seguramente no será fácil de olvidar por la docencia de San Luis, fundamentalmente por su trascendencia y sus consecuencias, y para ello siempre es bueno tener memoria y a veces mejor…. refrescarla.
Cuando se iniciaba el año, el Gobierno provincial a través de sus funcionarios y del propio gobernador, DECIA: “(...) No se prevé ningún tipo de aumento salarial para el sector público tanto para empleados y docentes (…)” ahora, con el tiempo, vemos que a esas palabras se las llevó el viento, y la lucha organizada obligó a un gobierno acostumbrado a imponer, a realizar un aumento del 40% de sueldo básico para el cargo testigo de maestro de grado y su aplicación al resto de la grilla docente, para llegar a un sueldo básico de $ 1001.
Seguramente los derrotistas de siempre, aquellos eternos disconformes, dirán: “¿Pero a que costo? y ¿la inflación???”…para esos cuestionamientos hay respuestas. Toda lucha tiene riesgos y costos, por ello es necesario asumir responsabilidad y compromiso… y arriesgar… A la historia la escriben los que hacen cosas y se juegan, no los que se esconden….
A los que recurren a la inflación como excusa para negar el valor de lo conquistado, es necesario pedirles que busquen en sus memorias cosas que ocurrieron y que parecen haber quedado en el olvido, porque sabido es que no se puede construir un futuro sin tener en cuenta lo pasado.
Para recordar…los sueldos docentes y las asignaciones familiares en San Luis, estuvieron congelados durante catorce años (una década y media), la cifra de $ 376 de sueldo básico para el cargo testigo de maestro de grado, era inexpugnable, a ello había que agregarle el congelamiento de la antigüedad, y a pesar de que eran tiempos de la recordada CONVERTIBILIDAD de Cavallo, no sólo había inflación sino que se caminaba al desmembramiento del país que terminó de hacer eclosión con la crisis de diciembre de 2001, con corralitos financieros y default incluidos. Mientras tanto en San Luís, los empleados públicos y docentes tenían que conformarse con los “doscientos pesos del ADOLFO”… ¿Se acuerdan?...(para los jóvenes, estos doscientos pesos era una cifra en negro y por persona que Adolfo R. Saá “repartía” prácticamente como una dadiva).
Tuvieron que pasar muchos años, para empezar la recuperación de derechos.
El año 2004 marcó el antes y el después. Más allá de errores y aciertos, comenzaba una nueva etapa de organización y recién en el año 2007, al fin caía esa cifra imperturbable después de 14 años y el sueldo básico pasaba de $ 376 a $ 551 ¿recuerdan?
Es bueno reconocer que mucho tuvo que ver la recuperación de la paritaria nacional docente (después de 20 años) que establecía pisos o garantías salariales. Que muchos, sino la gran mayoría, no tenían idea (y algunos aún lo desconocen) qué era una paritaria y mucho menos para el sector docente…
A finales del año 2008, el sueldo básico pasaba a ser de $ 715 y el Gobierno provincial no daba señales de cambiar su política salarial, pero una vez más el sector docente organizado le torcía el brazo al poder y conseguía llevarlo a la cifra de $ 1.001 a partir de diciembre de 2010 con la antigüedad, incentivo docente, zona y asignación familiar actualizada por fuera de la garantía salarial...toda una verdadera conquista de una lucha sin cuartel ante un desmesurado poder político –
De febrero de 2007 con $ 376 de básico (la hora secundaria valía $ 24,96) a diciembre de 2010 con $ 1.001 de básico (valor de hora secundaria $ 66,96), evidentemente significa que algo cambió y no fue precisamente el gobierno provincial ni sus políticas que son las mismas desde hace 27 años, basadas en el permanente ajuste y en su concepción “menemista/cavallista” de la economía y la política.-
El cambio radica en la organización que logró la lucha docente, a partir del surgimiento en San Luis de entidades gremiales y de nuevas dirigencias sindicales que han podido articular responsablemente las acciones necesarias para que las cosas lentamente cambien.-
Tampoco se puede dejar de hacer referencia a la existencia de sectores que no han estado a la altura de las circunstancias y por el contrario se han encargado de poner piedras en el camino, obstaculizando la unidad de los trabajadores, utilizando cuanto medio estaba al alcance para denostar el accionar gremial de otras entidades, sin medir consecuencias e inclusive recurriendo a engaños, a mala información e inclusive a bajezas personales, por nombrar algunas cosas.-
Estos sectores que se caracterizan por la intolerancia, nunca valoraron el esfuerzo permanente por la unidad en la acción para evitar que los conflictos se desmadren y terminen volviéndose negativos para los trabajadores, estas dirigencias que desorientan por su inestabilidad emocional y su desprecio por lo organizativo ponen en evidencia su intencional funcionalidad al poder político.-
Va concluyendo el año, y a pesar de no tener designado un ministro de educación (como consecuencia del conflicto de inicio de año, ese cargo esta vacante desde hace mas de tres meses……) nos preparamos para un 2011, con muchas expectativas, netamente electoral, con una paritaria nacional docente pronta a ser convocada y un calendario escolar de 190 días de actividad, tal como lo estableció el Consejo Federal de Educación (Resolución Nº 94/10) LEASE. Diario Clarín de edición del 9 de Noviembre 2010 y no como denunciaban algunos mal intencionados que había sido acordado en San Luis por el Frente Gremial Docente...a buen entendedor pocas palabras...
Nos espera un año 2011 con grandes desafíos y fuertes decisiones políticas, en el cual se avizoran tiempos en los que las organizaciones sindicales asumirán un rol importante. Por ello habrá que continuar cultivando la unidad de los trabajadores. Soplan brisas de cambio y el sindicalismo no está ajeno, por el contrario, quienes promueven esas brisas, son precisamente los trabajadores organizados.-
Por todo ello, por todo lo hecho y lo mucho por hacer, (y a pesar de algunos), se ha avanzado en organización sindical en San Luis (lo que nunca ha sido sencillo en nuestra provincia) y eso es bueno y debemos valorarlo. Con la consolidación del frente gremial docente, ya nada será igual, por ellos estamos cada vez más convencidos de que se está en el camino correcto y que todos los esfuerzos por la organización y la unidad ¡¡¡HAN VALIDO LA PENA!!!
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