lunes, 15 de noviembre de 2010

Relato desesperado de la hija de la señora que falleció en su domicilio del barrio CGT

Populardesanluis@yahoo.com.ar

COCTEL DE BARBARIDADES: MALA PRAXIS, ABANDONO DE PERSONA SEGUIDA DE MUERTE, COIMA Y SOBORNO EN FUNERARIA

NOTA: María Soledad del Valle Rodrigues A
Jorgelina Stach ( hija de Alicia Serrano, fallecida el día Sábado 6 Noviembre a las 14 hs en el Barrio CGT) denuncia a ASyST. Ya que el día Jueves 4 de Noviembre, en horas de la madrugada su madre tenía taquicardia y dificultad para respirar.
En una primera instancia, llamé al Sanatorio Ramos Mejía ya que ella al tener PAMI, la debían atender ahí. Allí me dijeron que no me podían mandar una ambulancia y que llamara a AsYst.
Llamé a AsYst. Y allí me empezaron a pedir un montón de datos técnicos, entre ellos desde cuando se encontraba con taquicardia y les dije desde hacía unos días, razón por la cual me respondieron que para ellos no era una emergencia.
Luego de dos horas decidí llamar a la Policía. Que debo reconocer se portó excelente, ya que llegó a los 5 minutos. Al relatarle lo sucedido, ellos mismos decidieron llamar a AsYst. En esta oportunidad se hicieron presente, luego de dos horas largas de espera.
Cuando llegaron a mi casa, el Dr. Rodrigo Mat.3809, se dedicó a llenar formularios, después la auscultó y le controló el pulso.
Incluso mi mamá de los nervios que tenía se rascaba la cabeza, y la enfermera que iba con el médico me pregunto si tenía Alzheimer.
Yo la seguía viendo mal, entonces le pedí por favor que la llevara al Sanatorio Ramos Mejía. Para lo que el me respondió que esa decisión no les correspondía a ellos y que si la trasladaban al Sanatorio, allí la dejarían toda la noche sentada en una silla de ruedas porque los médicos llegan a las 7 de la mañana del otro día y que por el cuadro que tenía que ver al médico de cabecera para que la derivara a un cardiólogo.
Entonces le volví a insistir .con el traslado ya que veía que mi madre no estaba bien, me respondió que si tanto insistía la llevara yo misma en un remis. (-3 de la mañana-).
De este modo se retiró con la ambulancia. Al día siguiente decidimos ver al médico de cabecera quien nos dio turno para el viernes. El sábado 6, en horas del mediodía falleció. Después que yo la había bañado. Volví a comunicarme con la policía, y vuelve la policía a llamar a AsYst. Coincidiendo que en la ambulancia que llega a mi domicilio, llega el mismo médico que la había atendido el Jueves. Le pedí que intentara reanimarla. A lo que el se negó. Todo esto en presencia policial. Entonces le pedí que me hiciera un acta de defunción. Para lo que también me dijo que no. Que solo le correspondía al médico forense o la médica de cabecera hacerle el certificado de defunción.
Se fue la ambulancia y luego la policía. Antes de retirarse la policía me dijo que no podía hacer nada hasta que no llegara
el médico forense.
Para ese momento llamé al Sr Julio Gardela (dueño de « El Cortijo «). Al rato de que mi madre fallece (mas o menos 10 minutos) llegó un señor que dijo ser de la Previsora, de apellido Sarmiento, diciéndome «pagame $ 2000 y te vendo el acta de defunción así te sacás el paquete de encima». Delante de la policía y los vecinos. Yo me negué. Recién a las 21 horas se hizo presente el forense Dr Giboín. Quien le hace el certificado de defunción.
Luego llegó Gardela quien me acompañó a la Comisaria 4ª a hacer la denuncia correspondiente.
En entrevista con el Dr. Gardela, este dijo que él acudió de inmediato por tratarse de una amiga: la acompañé a la Comisaría 4ª para hacer la denuncia pertinente por abandono de persona. Cuando quise hacer la denuncia me dijieron que no me la podían tomar por orden de la Jueza de turno. Entonces le pregunté quién era la jueza, y me dijieron que Mirta Esley entonces pedí que le llamaran y le dieran la orden aunque la realidad es que cuando la jueza da una orden lo hace por escrito.
Al rato salieron los oficiales diciendo que no podían comunicarse con la Jueza que tratarían de llamarle a Fajarldine de Amieva,
( Secretaria del Jugzado del Crimen nº 1).
De ahí nos fuimos al Parque Jardin del Recuerdo ( Julio A Roca y Lafinur). Me pidieron $1500 en efectivo.
Por último nos fuimos a Previsora y me pidieron $2900 efectivos.
Para que al fin el Parque Jardin del Recuerdo se hizo cargo de todo pero nos cobraron $1800.

Final de una noche increíble

Estos dos relatos, tanto de la hija, como el del CPN Gardela evidencian la total irracionalidad que se vive en la provincia. Acá queda demostrado una vez mas, que están tan corrompidas las estructuras sociales y oficiales, que cualquiera puede ser víctima de una y otra de tantas de estas injusticias.

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