Los familiares volvieron a marchar el lunes
Jairo Gonzalez, de 25 años estuvo mas de 5 horas tirado sin que llegara ni una ambulancia. Muriò desangrado.
La hermana de Jairo Gonzalez, el joven asesinado en el barrio Josè Hernadez dijo ayer que volveràn a marchar tantas veces sean necesarias hasta no snetir que se haya hecho justicia por la muerte de su hermano.
Toda la familia y sus amigos no pueden aceptar el dolor y la injusticia que les provoca la ausencia de su hermano. Tanto ella, Mara como su madre trabajan cuidando ancianos durante la noche. Al regresar no pueden sostener el màs simple diálogo al recordar a cada instante lo ocurrido la mañana del pasado lunes.
Su esposa María Guerra, su hijo de 7 años, su cuñado y otros compañeros lo lloran y recurdan dia a día. e insisten en seguir marchando por su memoria hasta que los policías queden encarcelados con sentencia perpetua, dijeron.
El alferez Garay Lepes habrìa sido quien le disparó a quemarropa porque éste se encontraba en estado de ebriedad discutiendo con su esposa en la puerta de su casa.
"Este uniformado decidiò gatillarle en la cabeza, porque no encontró otro modo de reducirlo", así de frío, relató otro policía pretendiendo justificar el accionar de su compañero.
Otros vecinos aseguran que se ha montado una típica campaña de desprestigio para Jairo diciendo que era violento, que golpeaba a su esposa, que también golpeó al policía, que por eso fue que lo mataron. Igual que tantos otros casos oliciales en San Luis, se procede del mismo modo: desacreditan al muerto.
Así pasó con la mujer policía que la incendiearon en La Punta, dijeron que era porque andaba dos o tres policías y hasta su cuñado; también lo hicieron con la nena que atropelló el auto de la policía, dijeron que era costumbre de la madre dejarla jugar en medio de la calle. También lo hicieron con Gramaglia, Dirita Adaro y todos los otros crímenes impunes.
El Popular ha indagado en profundiad todo lo ocurrido y sólo existen indicios de un proceer policial injustificable. Jairo, era el bajista del Grupo Nano, pertenecía también al Grupo de Tatro Independiente del TEA y también era empleado del Plan Pico y Palas.
Sólo en dos o tres oportunidades se había emborrachado en el 2008, nunca con actos de violencia y ese mismo día, solo por la denuncia telefónica de una vecina anónima, ñel se encontraba discutiendo con su esposa en el patio de su casa.
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