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EL CONFLICTO DE MALVINAS Y SU PROYECCION
¿Será América del Sur nuevo escenario de guerras?
Colombia ya es un óptimo teatro de operaciones... ¿Argentina se encamina en dirección contraria, o no?
Para poder analizar este tema lo primero que tenemos que tomar en cuenta es situarnos dentro de la realidad actual del mundo, que cuenta aproximadamente con 7000 millones de habitantes que pueblan el mundo, repartidos en 250 Estados o países legalmente constituidos. Ahora bien, el conflicto que sostiene La Argentina con Inglaterra por la soberanía de las islas Malvinas, involucra de forma directa e indirecta a los 28 países que componen la OTAN además de otros 22 estados aliados. Esta realidad nos obliga a pensar por ejemplo: que el desplazamiento de un submarino nuclear perteneciente a las fuerzas militares inglesas, que componen la OTAN y que son parte sustancial dentro de la Organización y Tratado del Atlántico Norte, necesariamente debe ser analizada dentro del contexto militar, geopolítico y de los intereses que esta organización representa en el mundo. Este submarino que arribará el 14 de junio, día en que se cumplen los 30 años del fin del conflicto bélico por la soberanía de los territorios irredentos, usurpados por los británicos, agrega una tensión más en las relaciones bilaterales de ambos países. Este artefacto conocido en la Real Armada como «el cazador asesino» armado con misiles Tomahawak y torpedos Spearfish, con los fines de vigilar y patrullar la zona de conflicto, para «proteger los intereses británicos», según lo expresado por una fuente del Ministerio de Defensa de Londres, es parte del armamento con que cuenta la OTAN. El HMS «Talent» alcanza una velocidad de 32 nudos y puede sumergirse hasta 305 metros de profundidad. En la reciente reunión realizada en Chicago en los Estados Unidos, el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen junto a Barack Obama y demás miembros de la organización, se plantearon la necesidad de un repliegue de todas las fuerzas que operan en territorios de Afganistán, para fines de 2014. La misma está compuesta por 130.000 hombres con todos sus pertrechos de guerra y el alto costo diario que presupone el sostenimiento de esta situación. Es pertinente suponer que Inglaterra como parte de este conflicto en Medio Oriente y en representación de los intereses económicos de la industria de la muerte «armamentos», se ve en la necesidad de sostener otros tipos de conflictos, de menor intensidad, pero que justifican su difícil situación económica y la de otros países de Europa, pero fundamentalmente el funcionamiento de sus industrias bélicas. El sostenimiento de esta guerra que lleva diez años desde su inicio y no se ha logrado resolver, con la insurgencia planteada por los talibanes. Necesariamente requiere de otros escenarios de conflicto y que para el caso que nos preocupa el Cono Sur de América ofrece un escenario propicio, para seguir concretando gastos militares por parte de los ingleses. De cualquier forma esta situación de beligerancia encubierta, que puede llegar a tener un mayor desarrollo, es preocupante para los argentinos y demás países de la región, por lo cual recomendamos a nuestros queridos lectores no desatender esta problemática, que todos los días nos promete nuevas alternativas de mayor tensión.
¿Será América del Sur nuevo escenario de guerras?
Colombia ya es un óptimo teatro de operaciones... ¿Argentina se encamina en dirección contraria, o no?
Para poder analizar este tema lo primero que tenemos que tomar en cuenta es situarnos dentro de la realidad actual del mundo, que cuenta aproximadamente con 7000 millones de habitantes que pueblan el mundo, repartidos en 250 Estados o países legalmente constituidos. Ahora bien, el conflicto que sostiene La Argentina con Inglaterra por la soberanía de las islas Malvinas, involucra de forma directa e indirecta a los 28 países que componen la OTAN además de otros 22 estados aliados. Esta realidad nos obliga a pensar por ejemplo: que el desplazamiento de un submarino nuclear perteneciente a las fuerzas militares inglesas, que componen la OTAN y que son parte sustancial dentro de la Organización y Tratado del Atlántico Norte, necesariamente debe ser analizada dentro del contexto militar, geopolítico y de los intereses que esta organización representa en el mundo. Este submarino que arribará el 14 de junio, día en que se cumplen los 30 años del fin del conflicto bélico por la soberanía de los territorios irredentos, usurpados por los británicos, agrega una tensión más en las relaciones bilaterales de ambos países. Este artefacto conocido en la Real Armada como «el cazador asesino» armado con misiles Tomahawak y torpedos Spearfish, con los fines de vigilar y patrullar la zona de conflicto, para «proteger los intereses británicos», según lo expresado por una fuente del Ministerio de Defensa de Londres, es parte del armamento con que cuenta la OTAN. El HMS «Talent» alcanza una velocidad de 32 nudos y puede sumergirse hasta 305 metros de profundidad. En la reciente reunión realizada en Chicago en los Estados Unidos, el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen junto a Barack Obama y demás miembros de la organización, se plantearon la necesidad de un repliegue de todas las fuerzas que operan en territorios de Afganistán, para fines de 2014. La misma está compuesta por 130.000 hombres con todos sus pertrechos de guerra y el alto costo diario que presupone el sostenimiento de esta situación. Es pertinente suponer que Inglaterra como parte de este conflicto en Medio Oriente y en representación de los intereses económicos de la industria de la muerte «armamentos», se ve en la necesidad de sostener otros tipos de conflictos, de menor intensidad, pero que justifican su difícil situación económica y la de otros países de Europa, pero fundamentalmente el funcionamiento de sus industrias bélicas. El sostenimiento de esta guerra que lleva diez años desde su inicio y no se ha logrado resolver, con la insurgencia planteada por los talibanes. Necesariamente requiere de otros escenarios de conflicto y que para el caso que nos preocupa el Cono Sur de América ofrece un escenario propicio, para seguir concretando gastos militares por parte de los ingleses. De cualquier forma esta situación de beligerancia encubierta, que puede llegar a tener un mayor desarrollo, es preocupante para los argentinos y demás países de la región, por lo cual recomendamos a nuestros queridos lectores no desatender esta problemática, que todos los días nos promete nuevas alternativas de mayor tensión.
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