Ada Lucero es profesora, directora y cuida de los 19 alumnos que asisten a su humilde escuela hogar ubicada a más de 200 Km de la Capital puntana.
No hay caminos para ingresar a la escuela. La pobreza es tan natural como los médanos que entierran literalmente al pueblo en fuertes vendavales.
Ella es una mujer grande. Tan grande como tantas otras maestras rurales del interior provincial. “A veces…, mejor dicho, casi siempre, tengo que sacar de mi bolsillo para darle merienda a los chicos”, dijo.
El Gobierno paga $1.89 por día x cada alumno y solo cuentan 22 días al mes. Lo peor, es que ese monto, -destinado al desayuno, almuerzo y merienda-, no se hace regularmente y a veces el atraso es de mas de 2 meses, por lo que la pobre directora debe ajustarse su propio cinturón para no desamparar a sus casi hijos.
La escuela es solo de nivel primario. Del total de la matrícula (19), sólo alcanzan el secundario dos o tres alumnos por año.
Ada explica
Populardesanluis@yahoo.com.ar
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